¿Estás luchando por deshacerte de esa pancita (pequeña o grande); de ese rollito justo en la cintura de tus jeans?
Es una lucha común, y generalmente intentamos con una dieta - reduciendo las calorías por unas semanas, pero encontramos que no es suficiente. Tal vez se baja la pancita unos días, pero luego regresa.
Además, sabemos que hacer una dieta estricta no es sostenible, nos hace infeliz y generalmente no funciona a largo plazo.
Pero si hay que hacer algo. Este aumento adicional de grasa en el área abdominal proviene generalmente del exceso de grasa visceral, el tipo de grasa que aumenta el riesgo de problemas de salud serias como presión arterial alta, diabetes, enfermedades cardiovasculares e incluso cáncer.
Entonces si te encuentras con esa barriga que no baja (o peor, que solo crece), es hora de cambiar algo definitivo. Las buenas noticias son que, SÍ se puede controlar, y NO implica matarse de hambre.
Comer suficientes alimentos antiinflamatorios (como los 5 que comparto hoy) hará la diferencia - en conjunto con evitar los “polvos blancos”: azúcar, harina blanca y sal común de mesa, para ayudarte a bajar la barriga y lograr una panza plana.
Las dos cosas deben ir de la mano para que sea más eficaz.
Intenta comer los siguientes 5 alimentos de forma más regular y verás como progresas hacia un abdomen plano:
1. Arándanos. Llenos de fibra y fitonutrientes, estas deliciosas “frutas del bosque” tienen la mayor capacidad antioxidante de las frutas frescas, y están relacionadas con niveles más bajos de insulina y grasa visceral más baja. Si puedes conseguirlas orgánicas, es preferible.
2. Pescado - “silvestre” de mar, no de criadero. Lleno de ácidos grasos omega-3 saludables, el pescado puede ayudar a reducir la grasa visceral y a nivelar los niveles de insulina. Se recomienda elegir pescados más pequeños (que llevan menos posibilidad de toxinas y más concentración de omega-3) y de aguas frías en lo posible. En el caso del Salmón (que es de mis preferidos), se recomienda elegir los que son etiquetados como “silvestres”, capturadas en el Pacífico, y evitar el salmón atlántico criado en granjas que se inyectan con antibióticos potencialmente dañinos y alimentado con cosas que no queremos absorber. SI NO CONSIGUES salmon “wild-caught”, elige una variedad de pescado local y fresco. Si eres vegano, elige otras fuentes de omega-3 incluyendo chia, linaza, semillas de cáñamo, nueces, hojas verdes y algas.
3. Aguacate. Llena de grasas mono-saturadas saludables, potasio, magnesio y fibra, esta fruta de bajo índice glucémico es una adición increíble a tu ensalada (o a casi cualquier plato). Ayuda con la absorción de antioxidantes, específicamente carotenoides, que ayudan a controlar la grasa y la inflamación del abdomen. Esta fruta desconecta las hormonas que provocan almacenamiento de grasa en el cuerpo, ¡y también impulsa tu metabolismo!
4. Nueces y semillas (preferiblemente crudas, sin aceite ni sal añadido). Aunque a veces personas asocian las nueces con grasa, comer nueces crudas (y todas las variedades, como las almendras) ha demostrado que ayuda a reducir la circunferencia de la cintura y la grasa corporal. Las nueces y semillas crudas son una buena fuente de proteínas, fibra y también contienen magnesio, lo que ayuda a mejorar la digestión y a reducir el exceso de grasa abdominal. Te pueden dar un impulso de energía cuando lo necesitas entre comidas. Y además, ¡son excelentes para la piel, el cabello y las uñas! Simplemente mantén tus porciones bajo control e intenta evitar variaciones tostadas y saladas.
5. Camote / Batata. No solo es una fuente excelente de betacaroteno, vitamina B6 y vitamina C, sino que agregar este vegetal a tu alimentación ayudará a frenar los antojos de azúcar y a evitar que busques ese dulce/postre. Además, tiene increíbles propiedades antiinflamatorias que te ayudan a mantener tu grasa abdominal bajo control. El camote es delicioso, económico y muy versátil: hazlo en rodajas o cubitos al horno (a mi me encanta con un poquito de aceite de coco, sal rosada y romero), como puré, o agrégalo a tu guiso / curry / “stir-fry” / sopa.
Aparte de estos 5 alimentos, también recomiendo beber té verde, ya que los antioxidantes en el té verde ayudan a quemar el exceso de grasa abdominal. Matcha es mi versión preferida (y aquí comparto una receta deli).
Agregar ciertas especies como la canela, jengibre y cúrcuma a tu alimentación diaria también ayuda mucho. Yo las consumo diario en mi batido verde.
Por último, es importante entender que los niveles elevados de insulina (por demasiados carbohidratos y azúcar) y de cortisol (por el estrés) empeoran la grasa abdominal.
¿Conclusión?
¡Come estos 5 alimentos antiinflamatorios (de forma más regular), elimina o reduce tu consumo de azúcar y los carbohidratos refinados, y asegúrate de mantener esos niveles de estrés bajo control! Practica ejercicios de respiración profunda, yoga, meditación, caminatas largas, incluso baños relajantes, y tu barriga será más feliz y más plana. Y sin duda, ejercicios con énfasis en el “CORE” (como mis clases de barre y yoga) ayudan mucho también.
Si quieres una orientación más personalizada para lograr tus metas de salud (sea bajar de peso u otras), comunícate conmigo aquí y podemos configurar una sesión de coaching inicial gratuita.
Con mucho amor,
Mariana